jueves, 19 de septiembre de 2013

No soy tu títere, ni de él, ni de ella, ni de nadie…





Allá por los años 80, un buen amigo mío, Xuxo, estando embarcado, solía soltar una frase que le iba muy bien con las chicas que conocía por esos puertos generosos que nos recibían. La frase, no era otra que; “Neniña, soy el títere de tus caprichos”. La verdad sea dicha que, no era muy común, la chica que escuchaba y se sentía receptora de la misma, se sonreía y por lo que contaba Xuxo, la “cosa “, le funcionaba.

Ya los años 80 pasaron. Ya hemos pasado el ecuador del 2013 y aquellas chicas,  tuvieron tiempo para desengañarse y la frasecita quedó obsoleta.

Sin embargo, hay gente en estos tiempos que corren, gente muy reconocida y al parecer, muy preparada, que confunden a las personas y colectivos, con títeres inanimados. Así les irá.


Para los creyentes, lo tenemos fácil, Dios está por encima de todo. Dios es bueno, Dios perdona y muestra el mejor camino.

Para los no creyentes y con la cabeza bien amueblada, saben que es muy importante el respeto y la tolerancia para la vida cotidiana.


La Democracia, que nos dimos, es una frase hecha, no es perfecta, pero si es la mejor forma conocida de que se defiendan los derechos del ciudadano y la ciudadana.

Dicho esto, entro en materia. 

El títere, según la Rae, entre otras acepciones, es…

·        .Muñeco de pasta u otra materia que se mueve por medio de hilos u otro procedimiento.

·        .Persona que se deja manejar por otra.

·        .Persona que actúa ligeramente o sin fundamento.


Pues bien, algunas personas, con o sin intención, con sus acciones y/o palabras, pretenden convertir a una persona o un colectivo en un “títere de sus caprichos”, que como decíamos antes, a Xuxo, le fue de maravilla con aquellas chicas, “pobriñas”, en aquellos puertos y en los años 80. Pero, los tiempos han cambiado. La gente, lee, tiene experiencias, ya hasta entran en Internet, se enteran de cosas que no dan o informan en las radios locales o televisiones nacionales.

Con la información, crece la autoestima de la persona, ya lo decimos en los cursos de “Miedo a Internet?”.
 

Por lo tanto, esta persona que les escribe, como el colectivo que democráticamente, marca el rumbo y puerto de destino de la asociación, no es ni somos títere alguno.
Esta reflexión, estoy seguro, la habrá hecho más de una persona. Aquí, en esta ciudad, la gente piensa, escucha, evalúa y sobre todo, tiene ojos y ve lo que hacen otras personas para ayudar a otras del mismo pueblo o comarca.
Créanme, los que todavía creen que mueven hilos, deben saber que,  lo que cada persona ve, comprueba y conoce de primera mano, es de mayor valor y realidad, y no se dejarán llevar de palabrería alguna, bien venga desde un despacho o mesa de bar alguna.

Otra cosa es que pretendan con esta persona o grupo que representa, “hacer títere a alguien o algún grupo”, que no es otra cosa, lo recoge la RAE, “Cautivarle el ánimo, atrayéndole y moviéndole agradablemente.”. Y añado yo, “para usarlo en su provecho y no en el de los demás”. 



Pero como no hay más ciego que el que no quiere ver, ya no es cuestión de graduación de gafas, va siendo hora que caiga bien o no, esta persona y el grupo en cuestión, es independiente, democrático y como sus estatutos y código ético, su principal misión es; “colaborar de manera altruista con Instituciones y colectivos para acercar Las Nuevas Tecnologías a la ciudadanía y con coste CERO para alumnado, centros e Instituciones.” Por cierto, sea de los principios que sean los gobiernos de las mismas, que también tienen sus derechos, porque seguimos creyendo que sus gestiones y decisiones, van en beneficio de la ciudadanía antes que de los propios gobernantes. 

Eso es democracia, y en ella creemos. ¿Si no creemos que somos títeres de nadie, por qué vamos a creer que los demás lo sean?


Esta persona que les escribe y nuestra asociación, que estamos de aniversario, no pretendemos contentar a todos, y si, ayudar a toda la población que podamos. Pero, siguiendo un camino que nos ha llevado hasta hoy y con cierto éxito y gracias a todo el alumnado y monitores que lo forman.




En fin, ya lo decía San Agustín, gran filósofo y padre de la Iglesia; "Es mejor cojear por el camino que avanzar a grandes pasos fuera de él. Pues quien cojea en el camino, aunque avance poco, se acerca a la meta, mientras que quien va fuera de él, cuanto más corre, más se aleja.".